Andalucía y por tanto sus ocho provincias, necesitan más y mejores empresas. Es una de las conclusiones recogidas en el Informe GEM, un documento internacional que analiza mediante diversas encuestas cómo es el tejido empresarial de cada país, de cada región, tanto potencial como consolidado, y que se elabora desde la Universidad de Cádiz bajo la dirección del catedrático emérito José Ruiz Navarro, director del Observatorio GEM de Andalucía. Los datos de la comunidad autónoma han sido presentados esta mañana por el profesor Ruiz Navarro con la presencia de la vicerrectora de Política Científica y Tecnológica de la Universidad de Cádiz, María Jesús Mosquera, y la viceconsejera de Universidad, Investigación e Innovación de la Junta de Andalucía, Lorena Garrido.
Este Informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor-Monitor de Emprendimiento Global) se actualiza cada año y tiene como objetivo «medir la actividad emprendedora, las actitudes y las aspiraciones de los individuos. A través de encuestas genera datos para obtener los indicadores que describen el proceso emprendedor y con ellos elabora informes anuales». En el informe presentado hoy, cuyo trabajo de campo se realizó el año pasado con 5.000 encuestas, se destaca que un 10,30% de los andaluces tiene la intención de crear una empresa; un 4,9% ya lo han hecho en los últimos tres años, y un 6,7 mantienen un proyecto consolidado al superar los tres años y medio de vida. La provincia gaditana se sitúa en unos porcentajes similares: seis décimas por debajo en la intención emprendedora, cuatro décimas por encima de la tasa media de empresas ya creadas y en el mismo 6,7% de iniciativas consolidadas.
Las cifras andaluzas de ese observatorio van subiendo de manera paulatina respecto a años anteriores, pero hay algunos datos que reflejan la escasa densidad empresarial de la comunidad autónoma andaluza y, también, el escaso reflejo que la creación de empresas tiene en el número de empleos creados, con un porcentaje que anda muy lejos de ser el necesario, ya que el 46% de los proyectos emprendidos en los últimos tres años es unipersonal, autoempleo, de forma que no han creado más puestos de trabajo ajenos al propio emprendedor. Y el 21% de los encuestados no tienen además previsto crear ningún empleo más en los próximos cinco años. Solo el 6% manifestaron su intención de crear más de 20 empleos.
Un tejido empresarial, por tanto, que no emprende con la intención social de reducir la dura tasa de desempleo de la región y que, además, adolece de un objetivo de calidad que los responsables del informe consideran «esencial» para el futuro empresarial de Andalucía y de cualquier región. Así, el 78% de los emprendedores encuestados no ha creado un negocio considerado innovador, que busque crear nuevos mercados y, por tanto, se distinga del resto. «Es una dura realidad», dijo Ruiz Navarro.
Entre las conclusiones y recomendaciones de este informe regional GEM se encuentran, entre otras, la necesidad de corregir los problemas estructurales que provocan diferencias entre territorios, disminuir la brecha entre hombres y mujeres a la hora del emprendimiento, apostar por la creación de más y mejores empresas, dinamizar los recursos del conocimiento (papel de las universidades) y mejorar la coordinación entre las instituciones y los sistemas educativo y empresarial.
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